Sahumerio de Yerba Santa

El Sahumerio de Yerba Santa se usa como incienso de purificación, amor, protección, limpieza, para marcar límites o sanar emocional y espiritualmente. Para algunas culturas indígenas, forma parte de la categoría de plantas sagradas.

Se dice que cuando sufrimos cambios emocionales, sahumar con Yerba Santa permite que se desbloqué la energía atorada en el chakra 4, el del corazón. 

Otro de sus beneficios más reconocidos es su poder para limpiar la energía de un nuevo lugar, por ejemplo, cuando alguien estuvo habitando mucho tiempo un espacio y quieres limpiar esa energía o cuando ves el ambiente tenso entre algunas personas y quieres propiciar un ambiente armonioso, o incluso para trabajar los apegos a sitios u objetos.

¿Cómo debo utilizar mi sahumerio?

Sahumar consiste en un proceso espiritual o mental en el que tener tu intención clara es tan importante como la presencia de tus los elementos. Tener tu intención lista hará que sea mucho más fácil decidir cuál es el sahumerio perfecto para la ocasión. Una vez que lo tengas claro, abre puertas y ventanas, así permitirás que toda la energía negativa se vaya y entre energía positiva en su lugar.

Ahora estás listo.

*Enciende tu sahumerio con una vela, un cerillo o un encendedor y realiza siempre movimientos circulares en dirección a las manecillas del reloj. Con una pluma o un abanico, guía el humo hacia lo que quieres purificar.

*Si quieres limpiar tu habitación, casa u oficina, empieza contigo mismo, desde los pies hasta la cabeza y de ahí regresando al corazón, siempre en movimientos circulares y calmados.

*Es turno de tu espacio, comienza desde la puerta principal y avanza en dirección a las manecillas del reloj, pasando por cada esquina, ventana y puerta.

*Tú decides el momento en que tu ritual finaliza, cuando estés listo, respira profundamente y tómate unos minutos para reposar tus pensamientos. Puedes cerrar repitiendo tú mantra inicial con ayuda de tu Japa Mala o simplemente agradeciendo al universo por todas las bendiciones han llegado y que llegarán.

Recuerda que la intención es la base de cualquier sahumerio: si tu corazón es puro y tu anhelo noble, potenciarás sus efectos.